Me gustaría compartir con vosotr@s la importancia de tener un espacio preparado para que el peque pueda aprender ofreciéndole múltiples oportunidades y a la vez ir desarrollando su autonomía.
Muchas veces preparamos su habitación pensando en nosotros y no en sus necesidades, de aquí la importancia de organizar la casa a medida del niño.
Como ejemplo tenemos esta primera imagen, una habitación pensada para el peque, con muebles a su altura y estanterías accesibles donde podrá explorar y ser capaz de elegir desde el primer año de edad.
Creemos un ambiente agradable, bien organizado y minimalista, con pocos ´juguetes´, los cuales iremos cambiando en función de sus intereses.
Las imágenes siguientes (abajo) son todo lo contrario, buena combinación de colores pero nada adecuada a la necesidad del peque de sentirse independiente, no puede si quiera coger un libro para llevárselo a mamá.
Debemos adaptar nuestra casa para que el niño se pueda mover por él.
No debemos tenerlo todo el día en la cuna de viaje, o hamaquita… debe estar en el suelo, encima de una alfombra y poder ejercitar sus primeros movimientos libremente para empezar a descubrirse a sí mismo.
Tener un baúl con todos los juguetes dentro es un caos para ellos, han de rebuscar y tirar por el suelo todos los objetos antes de encontrar lo que quieren. Y luego les decimos que han de recogerlo….
Si les proporcionamos su espacio ordenado podrán coger el juguete que buscan y dejarlo en su hueco cuando acaben. Aunque no lo creamos a ellos les gusta el orden.
¿Qué os parece? con un mueble bajito y sin puertas ya tenemos mucho camino hecho!